Jugando al Escondite...

Te busco… Lo hago entre sombras, entre susurros perdidos en el fondo de mi alma, te busco en mis suspiros perdidos en el viento, te busco…

Búscame… Hazlo en tus pensamientos, en cada recuerdo que me esforcé por dejarte, en cada caricia que recorrió tu cuerpo, búscame, y recuerda cada palabra, y cada beso.

Y a fin de encontrarnos, seguiremos el camino… Ese camino infinito, que buscamos cada día, el camino que seguir sin saber donde te guía, ese que te lleva a un sinfín de penas, y otras tantas alegrías.

Y cuando nos miremos… Fijamente a los ojos, entonces lo habremos conseguido, quédate mirando, sé que lo sabes, sé que eres capaz de oírme sin pronunciar palabra, eres capaz de leer mi mirada.

 

Te busco… En la sucesión de mis palabras, en mis escritos más profundos, en los más cálidos y en los que caen lágrimas, te busco y no te encuentro, aunque conmigo te llevo.

Búscame… En cada poema lanzado al viento, en cada grito ahogado que nadie escucha, pero tu serás capaz de escuchar, búscame, o encuéntrame, y así podremos sonreír una vez más.

Y si por fin nos vemos… Si eso ocurre podré besarte, regalarme un roce de tus labios, suave… Solo para deleitarme, para recordar el dulce sabor que tienen, y mirarte, siempre mirarte.

Y siguiendo ese camino… El que tiene mil desvíos, para perdernos, para que tengamos que esforzarnos en resolver el laberinto de la vida, y que al final del mismo, estés tú.

Y mientras te busco, te pierdo, te pierdo sin quererlo, recordando pensamientos, inundándome en palabras que me dijiste, en susurros perdidos en el pasado, en historias que contamos, pero no llegaron a suceder… En tantas cosas que quedaron pendientes, y que no pudimos realizar… Pero te busco, y trataré de encontrarte, para que ocurra de verdad.